Addis Ababa

Como ocurre en múltiples ciudades Africanas, y Addis no es excepción, el caos impera en las calles de la capital de Etiopía. Caos en forma de horribles atascos de tráfico, contaminación, edificios de hormigón con poco atractivo y un ambiente polvoriento. Todo ello hace que la mayoría de viajeros esquiven Addis y la consideren una simple puerta de entrada y salida.

Como siempre, sin embargo, Addis es parte importante del país, su centro económico y cultural y la cuarta ciudad más grande de África, y evitar sus calles significa dejar de entender una parte crítica del país.

Además, en Addis quizás no tengas hermosos paisajes ni tribus, pero dispones de una oferta culinaria difícil de igualar. Y perderse esto en el país con una de las mejores cocinas de África sería un desperdicio.

Dispones también de numerosos museos que pueden ayudarte a entender lo que verás o has visto en el país, así como algunos parques y avenidas de interés. Como elemento indispensable, una visita al Museo Nacional, donde se encuentra el esqueleto de Lucy, un ancestro nuestro de ni más ni menos que 3 millones de años de antigüedad. Casi nada...

Lo que sí es indudable es que para llevarse la paz interior lograda tras unas semanas de vacaciones, resulta más conveniente explorarla a tu llegada en lugar de reservarla para el final.